ÉTICA Y MORAL EN EL FUNCIONARIO PÚBLICO:
Lo que se pretende al fomentar la ética en el ámbito de
gobierno es motivar a los servidores públicos (políticos y funcionarios),
obtener mejores resultados en la definición de objetivos y en la prestación de
servicios y disuadirles llevar a cabo prácticas deshonestas, todo lo cual
conduce a una recuperación de la confianza ciudadana.
Todo individuo que participa de la función pública debe tomar
conciencia de que el servicio público se define como la acción del gobierno
para satisfacer las demandas y necesidades de las personas que integran el
Estado. Todo servidor público se debe a su comunidad, su sueldo es pagado por
la sociedad y por lo tanto tiene una responsabilidad y un compromiso con la
comunidad a la cual, además, debe respetar. Lo que se pretende al fomentar la
ética es motivar a los servidores públicos (políticos y funcionarios), obtener
mejores resultados en la prestación de servicios y disuadirles llevar a cabo
prácticas deshonestas, todo lo cual conduce a una recuperación de la confianza
ciudadana.
La imagen que se crea de la administración pública, ya sea
positiva o negativa, es resultado de la actitud y conducta de cada persona que
labora en una organización. Una buena imagen ayuda a creer y a confiar en las
instituciones públicas, una mala imagen genera desconfianza y rechazo.
LA ÉTICA Y LA FUNCIÓN
PÚBLICA.
CÓDIGO DE CONDUCTA DE
LOS SERVIDORES PÚBLICOS
Artículo 3°: A los
efectos de este Código son principios rectores de los deberes y conductas de
los servidores públicos respecto a los valores éticos que han de regir la
función pública:
a) La honestidad.
b) La equidad.
c) El decoro.
d) La lealtad.
e) La vocación de
servicio.
f) La disciplina.
g) La eficacia.
h) La responsabilidad.
i) La puntualidad.
j) La transparencia
k) La pulcritud.
FUNCIÓN PÚBLICA.
Cuando hablamos de
Función Pública hacemos referencia al conjunto de personas que trabajan en la
Administración mediante una relación profesional, retribuida y de carácter
especial en función del servicio público que realizan. Las personas que
integran la función pública son los principales agentes de la gestión y el
desarrollo del servicio público de la Administración.
FUNCIONARIO PÚBLICO.
Un funcionario público
es aquel trabajador que desempeña funciones en un organismo del Estado, que
puede representar a cualquier poder público que exista, ya sea el legislativo,
el ejecutivo o el judicial.
CLASIFICACIÓN.
CLASES DE FUNCIONARIOS
PÚBLICOS
• 1. Funcionarios de
carrera.
• 2. Funcionarios
interinos
• 3. Personal laboral,
ya sea fijo, por tiempo indefinido o temporal.
• 4. Personal eventual.
Son funcionarios de
carrera los que, en virtud de nombramiento legal, están vinculados a una
Administración Pública por una relación estatutaria regulada por el Derecho
Administrativo para el desempeño de servicios profesionales retribuidos de
carácter permanente.
Son funcionarios
interinos, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 10 y 25.2, los que por
razones expresamente justificadas de necesidad y urgencia, son nombrados como
tales para la ejecución de programas de carácter temporal y los que son
nombrados cuando existan exceso o acumulación de tareas por plazo máximo de 6
meses dentro de un período de 12 meses (art. 10.1)
Es Personal laboral, el
que en virtud de contrato de trabajo formalizado por escrito, en cualquiera de
las modalidades de contratación de personal previstas en la legislación
laboral, presta servicios retribuidos por las Administraciones Públicas. En función
de la duración del contrato éste podrá ser fijo, por tiempo indefinido o
temporal.
Es Personal eventual,
el que, en virtud de nombramiento y con carácter no permanente, sólo realiza
funciones expresamente calificadas como de confianza o asesoramiento especial,
siendo retribuido con cargo a los créditos presupuestarios consignados para
este fin.
Funcionarios de Carrera
Administrativa: Los encontramos en la República, los Estados, los Municipios y
en los Institutos Autónomos.
ES CONCISO:
Inculcar ideas y valores que faciliten el fortalecimiento del carácter
y la responsabilidad moral de los servidores públicos, como fundamento para una
mejor competencia profesional, el mantenimiento de relaciones humanas
respetuosas y el logro del bien público.
La promoción de la ética en el servicio público está
estrechamente vinculada con la transparencia, la cual actúa como elemento revelador
del buen funcionamiento del Estado, promoviendo el comportamiento responsable de
los servidores públicos. En este sentido, la ética pública adquiere dimensiones
relevantes al construir una cultura de servicio público, haciendo de la transparencia
una herramienta esencial en dicho proceso. No es posible hoy hablar de un gobierno
transparente sin requerir una rendición de cuentas clara y precisa por parte de
quienes laboran en la gestión pública.
La ética permite establecer la justicia o injusticia de las
acciones humanas, elevando así la cultura política de un pueblo o Estado.
Cuando un servidor público adopta estos elementos como principios de vida se ubica
más allá del poder y no se deja llevar por los apasionamientos, realizando
buenas obras para con su comunidad.
LA ÉTICA PÚBLICA Y SU RELACIÓN CON EL SERVIDOR PÚBLICO:
La ética pública es la disciplina que estudia y analiza el
perfil, la formación y el comportamiento responsable y comprometido de las
personas que se ocupan de los asuntos públicos, generando un cambio de actitud
en ella al inculcarles valores de servicio público.
Los valores en la administración pública son fundamentales
porque forman parte de la cultura organizativa, la cual es necesaria para la conducta
del personal al ayudarle a crecer y a desarrollarse en armonía. Los valores
éticos están presentes en cada actuación laboral y orientan el comportamiento.
La administración pública es responsable de los servicios que brinda: salud,
educación, vivienda, transporte, alumbrado público, alcantarillado, asistencia
social, mercados, espectáculos públicos, seguridad pública, protección civil,
parques y jardines, turismo, acciones culturales, recolección de basura, etc.
para lo cual debe tener en cuenta los siguientes principios: continuidad, suficiencia,
rapidez, seguridad, economía, calidad, innovación, eficiencia, con el objeto de
hacer de los servicios públicos «instrumentos satisfactores de la sociedad».
Un buen desempeño en
la prestación del servicio público, con calidad y eficiencia, ayudará a
recuperar la credibilidad y el reconocimiento perdidos por parte de la
ciudadanía. Cada servicio público es llevado a cabo a través del servidor
público, elemento humano fundamental para el buen manejo y funcionamiento de
las instituciones. El personal que labora en ellas facilita el normal desempeño
de la institución al integrarse y desarrollarse en ella, en beneficio de la
administración gubernamental.
Podemos decir que el servidor público es aquella persona que
presta sus servicios al Estado o a la administración pública. Desempeña una función
de servicio por lo que es necesario exigirle el estricto cumplimiento de sus
obligaciones así como el respeto a los derechos e intereses de los gobernados.